La Piel

La piel es nuestro límite visible y nos define porque es lo que vemos.  

Nos reconocemos como seres separados porque vemos el cuerpo físico solamente, sin embargo también tenemos cuerpos sutiles que nos rodean e interpenetran; a través de esos cuerpos que son tan reales como el físico, podemos reconocer a los otros seres aún sin haberlos visto y sin tenerlos cerca.

Esos cuerpos  están compuestos de energía que vibra de acuerdo a nuestros pensamientos y sentimientos, por lo tanto nos sentimos atraídos  fácilmente con los seres que están en la misma frecuencia vibratoria, por eso es que "conectamos" mas fácilmente con unas personas que con otras, sea a nivel intelectual, emocional o espiritual y en casos muy particulares  la vibración es tan armónica en todos los cuerpos que cuando se da el encuentro de esas dos almas, el resultado es unidad, entendimiento, fusión.

La piel es sensible y percibe fácilmente el frío, el calor y la humedad y otra clase de sensaciones sutiles de atracción o rechazo  hacia objetos o personas.

Debemos estar atentos, tomar en cuenta lo que nuestra piel "siente" o percibe de otras dimensiones de existencia.

Nutrir y amar la piel, tocándola con caricias y suaves masajes usando aceites o cremas es un acto de amor que nos puede llevar de regreso a nosotros mismos cuando nos olvidamos de que dentro de el cuerpo y la piel que poseemos está habitando nuestra alma y nuestro espíritu y deben ser cuidados y mimados para conservar en buen estado nuestro templo.

Un bebé necesita caricias para crecer sano y sentirse amado y cuando vamos creciendo, esa necesidad no se pierde; acariciemos la piel de los seres que amamos.

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LOS ANGELES en ocasiones llaman nuestra atención tocándonos la piel con una suave brisa, en esos momentos debemos agradecer su presencia y sentir su compañía dándonos apoyo.

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AFIRMACION

Mi piel es suave, sensible y bella.

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RECOMENDACIONES

< Optimismo es la palabra clave para empezar el día, las actividades, el trabajo, lo que sea.

> Demuestra amabilidad aunque la situación no te agrade, una dosis de buen trato puede aplacar al mas encolerizado.

< Cree en ti, eres importante para ti mismo.

> No es suficiente pedir, tienes que hacer tu parte.

< No te quejes, no critiques.

> Repite con frecuencia: Dios es sabiduría, bondad, amor y tu vida se llenará de esas cualidades.

Apreciemos la naturaleza en todas sus manifestaciones y con gratitud y amor vivamos cada día.

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Respetando todas las creencias

Bendiciendo todos los caminos

Pilar Sánchez Valarezo

  Maestra de Reiki